¿Estás pensando en comprar en comprar un nuevo cabecero? ¿Te has cansado de la decoración de tu dormitorio? ¡Redecóralo y capacidad tu estancia! Inspírate con la selección que hemos hecho de los mejores cabeceros de cama, que darán un toque de modernidad a tu habitación.
Los cabeceros de cama son elementos escenciales de la cama que aportaran un toque de diseño a nuestra habitación, y son los únicos muebles que no pueden faltar en un dormitorio. Una buena decoración virará siempre entorno a los cabeceros de cama que hayamos escogido, en base a nuestros deseos y estilo y se convertirán sin duda en personajes principales absolutos de nuestra habitación.
Además de esto hay cabeceros de cama de diferentes estilos para que puedas encontrar el que mejor te defina. Su función a una parte de adornar tu dormitorio es resguardar la pared y además puesto entre la cama y la pared evitaremos que la ropa de cama, tanto sábanas como edredones y demás, se ensucien pegadas a la pared o coladas por el hueco de la cama.
Datos a tener en cuenta antes de comprar un cabecero. Guía de compra:
¿Cuál es el más destacable cabecero?
El cabecero especial será el que coincida con tu gusto y bolsillo ¿Verdad?
Pero hay otras cosas que debéis estimar. Por poner un ejemplo, el estilo. Podría ser victoriano, romántico, ecléctico, tradicional o moderno, depende del aspecto que deseéis dar a la habitación.
El tamaño sí importa en este caso, porque si vuestra cama es individual, marital o de tallas más enormes, de esa dimensión deberéis comprar el nuevo cabecero. Asimismo el material con el cual esté elaborado será un aspecto importante para decidir. Algunos son de forma exclusiva de madera con revestimiento de melamina o tapizados con piel, polipiel o lonas realmente bonitas.
Lo indispensable es que ese material que seleccionéis sea de simple limpieza, ya que un cabecero es imposible meter en la lavadora ¿Cierto?
Es por esto por lo que te recomendamos que todo el dormitorio gire en torno al cabecero y a tu cama. Ten en cuenta que es el elemento más grande y el que más capta la atención. De ahí que tenga que ser la piedra angular del estilo de la estancia.
Funcionalidad
Lo primero en lo que debemos meditar antes de comprar un cabecero para nuestra cama es en la utilización que vamos a ofrecerle, o sea, está claro que un cabecero de cama sirve principalmente para aislar el colchón de la pared y proteger esta del roce y al colchón de la frialdad y humedad de la pared, pero, al cabecero puedes ofrecerle más usos, naturalmente que sí. Piensa exactamente en qué haces en la cama aparte de dormir.
¿Amas leer en la cama ?, si es de esta manera sería maravilloso que el cabecero cuente con una pequeña luz de lectura o que ofrezca la oportunidad de acoplarla.
Asimismo son muy útiles los cabeceros que tienen un estante en su parte superior en el que vamos a poder poner nuestro móvil, despertador, pañuelos y todo cuanto podamos requerir a media noche. Además, ciertos incluyen cómodos aparadores aprovechando el espacio lateral en los que vas a poder guardar tus libros o lo que prefieras.
Dimensiones
No descuides las dimensiones del cabecero elegido, pues esto no solo dependerá de las dimensiones de tu colchón, asimismo, debe ver con tus deseos, ya que si deseas poner mesitas a la noche a su lado o enfrente, influirá en las dimensiones del cabecero.
A fin de que tu cabecero quede visualmente atrayente, siempre y en todo momento es aconsejable que el cabecero sea más grande que el ancho que el colchón, de modo que siempre quede centrado y de sensación de orden. En caso contrario, si te decides por un cabecero más pequeño que el colchón o que quede realmente ceñido a este, vas a perder parte de la herramienta de aislamiento que proporciona estos utensilios.
Materiales
Esto es esencial y no solo dependerá del dinero que tengas que gastar, sino asimismo de la decoración de tu dormitorio y de tus gustos. Muchos son los cabeceros que hay en el mercado; todos elaborados con diversos materiales, como el de melamina chapada, el que es un cabecero de muy buen resultado, pero no es tan resistente como el de otros materiales, asimismo, están el de forja y los metálicos, los que son resistentes y garantizan una extendida vida útil del mismo. Esos últimos se pueden encontrar en una extensa variedad de diseños y colores, desde el clásico cabecero negro de forja hasta otros considerablemente más modernos e incluso juveniles, que sin lugar a dudas se adecuará a tus pretensiones.
En el mercado asimismo puedes encontrar cabeceros de madera maciza, que son los más buscados, pues son robustos y duran toda una vida, y los cabeceros tapizados, que los puedes encontrar de diferentes materiales y diseños, desde el algodón hasta la piel.
Antes de encantarte por un cabecero, siempre ten en cuenta su material de elaboración a fin de que observes si se acomoda o no a tus pretensiones.
Diseño
Como último aspecto, pero no menos importante tenemos el diseño del cabecero. Esto sí va únicamente unido a tus deseos y opciones, ya que vas a ser tú el que decidas con cuál te sientes más cómodo y cuál pega mejor con el resto de la decoración de tu dormitorio. Deberás elegir un género de cabecero distinto si tu dormitorio cuenta con un diseño clásico, rústico o moderno, de todas formas si estás buscando un cabecero para una habitación juvenil o aun infantil, de ello va a depender el tipo de cabecero a elegir.
En esto entra en cuenta los colores presentes en exactamente el mismo, los acabados, mates o refulgentes o incluso con alguna textura, el tapiz elegido en los tapizados, el dibujo del acolchado, la composición en la situacion de los de forma y los de madera… aun vas a poder hallar cabeceros con diversos vinilos que te dejarán poder personalizar al máximo tu habitación.
Varios Géneros de cabecero de cama
Con la pluralidad de opciones en el mercado, lo que corresponde estar bien informados para seleccionar exactamente el cabecero que precisáis para vuestra cama. Si bien podríamos comenzar a meditar en los colores, lo recomendado es primar el diseño, que es lo primordial y el punto de partida para determinar los diferentes tipos de cabecera:
Cabecero de panel
Puede estar conformada por uno o numerosos cuadros , lo que le entrega una forma sólida. También podéis encontrarlo con detalles verticales u horizontales o texturas, que lo pueden llevar a cabo más elegante , entretenido o sencillamente ofrecerle un toque de singularidad.
Cabecero tapizado
Es un modelo acolchado con espuma, que paralelamente tiene la posibilidad de tener una pluralidad de detalles, como mechones, cabezas de clavos o soldaduras. Puede estar tapizado en polipiel o tapizado en tela. Por lo general es plano, pero asimismo puede hallarse con bordes laterales. A su vez, es posible que en su estructura tenga un marco de madera.
Cabecero estilo trineo
Su nombre ya nos da pista de la forma que tiene, y sucede que su aspecto curvo, hacia el lado contrario del colchón, provoca que la cama parezca un trineo.
Tamaños del cabecero de cama
Más que la marca del cabecero o cualquier otro aspecto, el próximo paso más sensato va a ser pensar en los tamaños de caberos que hay. Esto nos dejará cerciorarnos de que calce a la perfección con la cama. Y sucede que , en un caso así , lo mejor será evitar seleccionar un cabecero algo más pequeño que la cama. Aquí esos pocos centímetros van a marcar la diferencia.
Las opciones que hay se ajustan de manera perfecta a las medidas habituales de los colchones , conque no es difícil localizar uno que calce de manera perfecta. Pero, claro, si tenéis una cama especial , fuera de lo común y no le encontráis cabecero, lo mejor va a ser mandarlo a hacer con un profesional, empleando las medidas concretas de vuestra cama.
Individual
Es perfecto para una cama individual. Para ser más específicos , hablamos de medidas de unos 90 cm de ancho x 190/200 cm de largo. Si bien en España hay un estándar de medida tenuemente superior para camas individuales que es 105 cm de ancho x190/200 cm de largo.
Matrimonial
Una cama doble, colchón terminado o cama de matrimonio, como sea que la llaméis, necesitará un cabecero con estas dimensiones: 135 cm de ancho x 190/200 centímetros de largo.
Queen
A este tamaño asimismo se le conoce como doble o tamaño matrimonio. Las medidas son: 150 cm de ancho x 190/200 cm de largo y son las medidas más populares en España.
King
Con medidas de entre 180 cm de ancho x 200 cm de largo.
California King
También se le llama colchón presidencial, es una medida normalmente utilizada en países anglosajones y hablamos de 200 cm de ancho x 200 cm de largo.
Usos del cabecero de cama
Alén de poder ser ornamental o de ser un factor cómodo para descansar la espalda cuando os sentáis sobre la cama, como en el caso del cabecero tapizado y acolchado, este accesorio puede ser mucho más servible.
Según su diseño, puede permitiros el aprovechamiento del espacio de la pared para almacenar cosas o puede ser un espacio que aún más personalizado que les permita poner algunos adornos o un espacio en donde tener siempre a la mano nuestros libros para una lectura antes de reposar.
Colocación del cabecero de cama
2 aspectos que no puedes pasar por alto bajo concepto alguno. Tienes que tomar en cuenta que un cabecero, por encima de todo, tiene que ser resistente. Aunque no tiene motivos por los que padecer, siempre es recomendable asegurarse de que los materiales usados tienen la posibilidad de soportar bien el paso del tiempo.
Por otro lado, desde nuestro criterio, creemos que puede ser atrayente asegurarte de que incorporan algún sistema de anclaje a la pared. De esa manera podrás asegurarte que siempre y en todo momento están seguros.
Facilidad de cuidado del cabecero de cama
Límpialo periódicamente
Aunque no lo parezca, los cabeceros de cama se ensucian por la utilización, ya que están en contacto con la grasa del pelo o cuando se usan para recostarse a leer, de ahí que es muy importante que los limpies periódicamente.
Sin importar el tipo de material por el que te hayas decidido al comprar tu cabecero, puedes limpiarlo usando un paño seco y un producto sugerido para dicho material. Pasa el paño por toda la superficie y cada recoveco que consigas localizar. Al terminar, pasa un paño seco para remover cualquier resto de humedad que pueda quedar.